Oficialmente abierta la sede de la religión mundial única

Ya es oficial: Bajo el lema «Diversidad dentro de la unidad», la “Casa de la Familia Abrahámica” de los Emiratos Árabes está oficialmente abierta.

Según lo publicado en Khaleej Times la “Casa de la Familia Abrahámica” ya recibió a sus primeros adoradores en la mezquita, la iglesia católica, la  y sinagoga judía durante febrero. Sin embargo a contar de hoy 1 de Marzo ha sido abierto oficialmente a sus adoradores, con foros y guías.

Localizada en la Isla Satyat de Abu Dhabi,  según el artículo,  “el visitante podrá practicar su fe en cualquiera de las tres casas”. En la iglesia (católica), la sinagoga (judía), o la mezquita (musulmana). Y podrá asistir a las demás “como invitado”.

Este hecho, sin ninguna duda, son la base de la única religión mundial, que según la profecía bíblica, será la que regirá en los días del fin. Esta religión única será respaldada por el anticristo, quien empujará este tipo de adoración bajo pena de muerte.

Esta abominación, recientemente oficializada y abierta al público, reúne a tres cultos que niegan a Jesucristo. Observemos el porqué:

¿Cómo se llega al cielo según estos cultos?

Desde la perspectiva judaica: No todos los judíos creen que se llega al cielo, pero los que lo hacen,  lo logran mediante «buenas obras» o como ellos le llaman, «Mitzvahz». Un mitzvah es cualquier cosa que hagas y que beneficie a un tercero.

Sin embargo, leyendo la misma Torah que ellos leen y memorizan, nos encontramos con Isaías 64:6 que niega lo que ellos creen:

«Si bien todos nosotros somos como suciedad, y todas nuestras justicias como trapo de inmundicia; y caímos todos nosotros como la hoja, y nuestras maldades nos llevaron como viento.»

Desde la perspectiva musulmana: Se llega al cielo, o como ellos le llaman, «paraíso», viviendo religiosamente pidiéndole a su dios «Aláh» que los perdone, y mostrando buenas acciones por los demás.

Según esta creencia, sus buenas acciones serán “recompensadas” al final de sus días, tras obedecer las ordenanzas impuestas por el dios que adoran.

Sin embargo, volvemos a Isaías 64:6, que incluso en el Corán reconoce, y que establece que las obras son trapos de inmundicia, y no sirven para lograr llegar al cielo, por lo que necesitamos un Salvador.

Punto importante a destacar de esta religión es lo que leeremos del  Coran 17:112:

«Toda alabanza corresponde a Al-lah, que no ha tomado hijo alguno para Sí, que no tiene socio alguno en Su Reino, ni tiene a nadie que Le ayude por debilidad”. Y ensalzad Su Gloria con toda alabanza.»

En ese verso de su  libro sagrado, se establece que la deidad que adoran, el dios Aláh, «no tiene hijo».

Hay que hacer notar que la religión musulmana fue inventada 600 años después de Cristo, y para ese entonces ya se sabía del nacimiento, muerte y resurrección de Jesucristo. Sin embargo, cuando se inventó el Corán, se omitió deliberadamente que Jesucristo es el Hijo de Dios.

Desde la perspectiva católica, inventada por el emperador Constantino 300 años después de Cristo, aunque adhiere al evangelio (buenas noticias de salvación), no se mueve en los principios ni enseñanzas cristianas, o que tengan como propósito que sus fieles lleguen a una relación personal con el Creador. También se basa en «obras».

Basta hacer notar -solo una- de las muchas declaraciones del actual líder, Jorge Bergoglio. Declaraciones como:

Papa Francisco a los ateos:

«No tienen que creer en Dios para ir al cielo».

Con esto, Bergoglio elimina  la importancia de seguir al Señor Jesucristo, y a creer en Sus palabras cuando declara «Yo soy el Camino, la Verdad y La Vida». (Juan 14:6)

El líder del romanismo, y en general sus sacerdotes, tuercen las Escrituras, las omiten, o bien practican actividades abiertamente anti-bíblicas como orar a los muertos, a quienes llaman «santos» (lo que es una herejía), un bautismo que no es mediante inmersión sino a través de salpicadura de agua, etc.

Incluso, por cientos de años prohibieron a sus fieles la lectura de la Biblia, y solo sus sacerdotes podían hacerlo bajo pena de tortura y muerte.

Una de las más chocantes aberraciones de este culto es llamar al su líder «santo Padre» y que expresamente prohibió el Señor Jesucristo

Y no llaméis a nadie padre vuestro en la tierra, porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos. (Mateo 23:9)

Cabe preguntarse ¡¡qué pensaría el Señor Jesucristo si un católico llamase a Mario Bergoglio «santo padre» en su presencia!!

El catolicismo, en general, lleva a sus fieles a actividades netamente religiosas, donde no existe relación alguna con el Creador, sino con el culto. No estimulan al creyente a leer la Biblia, sino a participar de sus ritos anti-bíblicos.

Resumiendo

Aunque las tres religiones buscan “un acercamiento a Dios”, las tres adolecen de la llave para acercarse a Dios. Y esa llave es Jesucristo.  Las tres NIEGAN a Jesucristo.

Por otra parte aunque estas tres religiones se acaricien, y tengan la intención de mantener alguna forma de «paz», tendrán una paz absolutamente falsa, útil al Anticristo.

El Señor Jesucristo tiene unas palabras para estas tres religiones que se auto proclaman como  “la Casa de la Familia Abrahámica”. Y esas palabras se encuentran en Juan 8:54-58

«Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria nada es; mi Padre es el que me glorifica, el que vosotros decís que es vuestro Dios.

Pero vosotros no le conocéis; mas yo le conozco, y si dijere que no le conozco, sería mentiroso como vosotros; pero le conozco, y guardo su palabra.

Abraham se gozó de que había de ver mi día; y lo vio, y se gozó.

Entonces le dijeron los judíos: Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Abraham?

Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy

 

Así es. La religión mundial única ya está configurada. Y cada vez que los enemigos de Jesucristo dan un paso adelante, solo nos recuerda que el Señor está aún más cerca.

Por nuestra parte,  y como iglesia de Cristo, oremos para que más personas escapen de estos cultos abominables, y se acerquen al verdadero Mesías, a Jesucristo, quien es ANTES de Abraham.

Oremos para que más personas salgan de la religión,  y se adhieran a la salvación. Salvación que encontramos exclusivamente en el Señor Jesucristo.

Está escrito:

«Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo.

Y EN NINGUN OTRO HAY SALVACIÓN; porque NO HAY OTRO NOMBRE bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.» (Hechos 4:11-12)